El blog llega tarde de nuevo, lo sé, pero el cumpleaños se cruzó. Qué más puedo decir? Me tuvieron que aplicar una intravenosa tan solo para poder despertarme el suficiente tiempo para escribir la página de hoy. En fin, afortunadamente la novela de la semana pasada no fue uno de esos tabiques. DANCING WITH BEARS, del genial Michael Swanwick, apenas llega a las 300 páginas (y con letra bastante grande, de hecho). Desgraciadamente, acaba siendo una ligera decepción…
Hace unos meses mencioné mi entusiasmo cuando me enteré que los dos personajes Surplus y Darger (anti-héroes de varios cuentos de Swanwick) finalmente iban a protagonizar una novela. Quizá ese mismo entusiasmo elevó demasiado mis expectativas hasta niveles irrazonables. Puede ser. El libro en si no es malo. Es solo que al final del día no me acabó convenciendo. Para los que no los conocen "Surplus" es Sir Blackthorpe Ravenscairn de Plux Precieux (Surplus de cariño), un perro genéticamente alterado que camina en dos patas y habla y piensa como un hombre. Aubrey Darger, por su parte, es un elegante dandy inglés. Juntos son un par de estafadores en un futuro no tan lejano (que en realidad nos recuerda más a un mundo medieval) y que aparecieron por primera vez en el cuento "The Doig Said Bow-Wow" del 2001. Ese extraordinario cuento logró ganar el Hugo hace una década, y merece ser leído por todo aquel que se jacte de aficionado a la CF. Poco después el par regresó en "The Little Cat Laughed to See Such Sport" que en vez de ser una simple secuela genérica logró inclusive ser una historia superior a la original. Aparentemente nadie se molestó en avisar a Swanwick que las secuelas deben ser malas. Por otra parte, el tercer relato, "Girls & Boys Come Out to Play" ya quizá nos indicaba que la formula se estaba cansando. A mucha gente le gustó, pero en mi opinión parecía que Swanwick volvía a utilizar a sus personajes favoritos solo porque sabía que iban a vender, no porque en realidad tuviera algo nuevo que decir con ellos. DANCING WITH BEARS, a pesar de ser una novela entretenida, me deja con una sensación vagamente similar. O a la mejor simplemente es un caso donde los personajes funcionan mejor en cuentos cortos que en novelas completas.
Un brevísimo resumen nos haría creer que la historia es muy buena. Darger & Surplus deben viajar de Constantinopla hacia Moscú, para entregar las Siete Perlas de Bizancio (en realidad siete jóvenes mujeres alteradas genéticamente) al gran Duque Moscovita. Por supuesto, todo esto es una especie de elaborado fraude. Mientras Surplus actúa de embajador de la corte bizantina, Darger recorre Moscú en busca de la Librería Perdida de Iván el Grande. En el curso de estas dos historias paralelas, ambos personajes conocen a varios personajes exóticos. Quizá demasiados. La acción se diluye y no hay mucha oportunidad de desarrollar ni a la mitad de estos personajes (quienes normalmente parecerían muy interesantes y llenos de posibilidades). Antes que todo acabe, Moscú se verá envuelta en una revolución nuevamente. El hecho que los dos protagonistas deban pasar tanto tiempo separados no ayuda, en mi opinión. Ambos son personajes muy bien acabados, pero su mayor atractivo son sus interacciones. En fin, un raro tropiezo para el señor Swanwick.
Prefiero recomendarles THE DOG SAID BOW-WOW, la colección del 2007 que junta todos los cuentos de Surplus y Darger, mas varios otros. De los cinco premios Hugo para cuentos cortos que Swanwick ha ganado, tres de esos ganadores se encuentran aquí reunidos. (Mi favorito, sin embargo, quizá sea "The Skysailor's Tale". O quizá "A Small Room in Koboldtown" con su incongruente mezcla de prosa Chandleresca y hadas. O quizá "Urdumheim" un verdadero cuento sui generis si alguna vez he visto uno. O quizá ese. O quizá aquel. Y ni siquiera he mencionado los otros dos cuentos ganadores del Hugo. Con Swanwick, las posibilidades son infinitas)